La aguda mirada de Víctor Hugo sobre Espert y su vínculo con el narcotráfico

En su editorial, el periodista analizó los últimos traspiés del Gobierno de Javier Milei y explicó cómo los medios de comunicación y los poderes concentrados están evitando hablar de los problemas para lograr ganar las elecciones de medio término.

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“Perdida la brújula, ni la economía ni la guitarra de rockstar parecen sonar”, explicó este martes durante su editorial Víctor Hugo Morales. Lo hizo al analizar el complicado momento que atraviesa el Gobierno de Javier Milei, con el dato supuestamente positivo de más deuda para contener el dólar, un candidato de primera línea acusado de tener vínculos con el narcotráfico y las internas a cielo abierto. Dijo que si esto no sale a la luz en todos los medios es porque hay una “masa de no información” por parte del establishment para ganar las elecciones.

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El editorial de Víctor Hugo Morales
Espert no podría resistir unas pocas horas como candidato si el sistema mediático que mira para otro lado se ocupara del tema. Marcela Pagano desde la derecha y algún comunicador muy metido en la interna de La Libertad Avanza piden que dé un paso al costado.

 
El espectáculo de un candidato número uno en la provincia de Buenos Aires que debe vivir escondido es impresentable. Pero si se sostiene es porque ni la mafia de Clarín ni La Nación se pronuncian en el tema. Le ahorran a Espert la información y los comentarios de TN, 300 canales más de Clarín en todo el país, la web y todos los diarios de Clarín en el interior.

 
 

Esa impresionante masa de no información se opone con su silencio a los que saben cómo apareció el esperpéntico asunto del candidato de los narcos. Espert, por ahora, resiste. Pero se bajó en Tres Arroyos. Y no puede dar la cara en ninguna plaza del conurbano.

Debe hacer la campaña en estudios de TV y sin avisar previamente su presencia, porque si no es posible que deba salir en la motoneta de algún barra brava, como pasó en Lomas.

El establishment, qué vergüenza, se resiste a contar la historia porque quiere ganar la provincia. El mismo día que Espert era denunciado en El DiarioAR, las tapas atacaban a Kicillof y al peronismo con las fallidas encuestas a las que siempre recurren para intoxicar la democracia.

 
Le importa a Magnetto tres pepinos Espert o el propio Milei, que dejó la imagen de su arenga por megáfono, sin poder hacer una mínima caminata por la ciudad y declinando realizar el discurso prometido, con la señal televisiva de Presidencia encendida durante horas esperando su palabra.

Al final solo fue con un megáfono que pudo decir que el país está fantástico. El mismo día el dólar rebotó un poco, las acciones cayeron y los bonos también. Salía a la luz lo de Espert y su tropa se peleaba a viva voz. Eso le pasaba a Milei.

Se veía en algunos canales el video de El País de España en el cual se ve a Milei con el papelito que le dio Trump para apoyarlo. Al final se lo pudo entregar, y como un chico en falta se acomodó en la silla, prolijó el saco y se peinó con gesto fugaz de simulador.

 
Trump entonces le entregó el papel en la indecorosa ceremonia en la que pidió la reelección de Milei. Y también se vio cuando le preguntan a Trump si va a poner plata para la Argentina y Trump dice que seguramente no hará falta.

Entonces Caputo mira la cámara desorientado, preguntándose si mucha gente estará viendo el sainete. De norte a sur, de Nueva York a Ushuaia, perdida la brújula, ni la economía ni la guitarra de rockstar parecen sonar.

En los cuatro puntos cardinales parece que su estrella es una luz camino al horizonte fugaz. Acá lo esperaba Caputo con malas nuevas. Espert, para explicarle que el kirchnerismo texano miente con la historia de los 200 mil dólares y que Machado (“en serio te digo Javier, no lo conozco al tipo, no sé quién es”) es un invento.

 
A la hora de preparar el programa, estuvo hablando por la televisión. Todavía tiene cara. Qué cosa, ¿no?